Hay que ser perro para entender

Vine desde Perú a Bcn a estudiar y en casa dejé a Tomás, un labrador de quien he aprendido mucho y lo extraño. Como experiencia puedo decir que me ocupaba 100% de su cuidado de manera habitual: baños, paseos, alimentación, vacunas, engreirlo, etc., tal cual un hijo. Actualmente, en mi casa no viven otros animales, por lo que aquellos perros que acoja estarán siempre y solo conmigo. Si se quedan a dormir lo harán dentro de mi cuarto (10m2), solo necesitaría que me dejen su cama (además de la correa, comida, platos, y cualquier otro). Los paseos al parque no van a faltar. Me especializo en el juego ya que soy entrenador de fútbol. Desde pequeño jugué mucho -todo tipo de juegos- y al estar constantemente poniendome en el lugar y zapatos del otro, fue como desarrollé una gran empatía. Es una de mis habilidades ya que es gran herramienta de comunicación, y más aún con las personas y animales (aunque siempre prefiero hablar de seres vivientes en general porque creo que nosotros los humanos somos igual de animales).