Bambi es un ángel. Le recogí de la calle cuando tenía unos 7 meses. Había sido muy maltratado y llegó con varias costillas rotas. Es un perro tímido y con algunos miedos y es también el perro más bueno y dulce que jamás he conocido.
Se lleva bien con otros perros, con gatos, pájaros.... en realidad, es tan bueno que cuida a mis gatos y a mi lora como si fuesen sus bebés.
Amo a Bambi con todo mi corazón. No me imagino la vida sin el