¡Tener a Bonga en casa ha sido estupendo! Además de portarse de maravilla es muy cariñosa (el primer dia ya nos daba lametones) y atiende a lo que le dices. Incluso aunque no es lo que más les gusta del mundo ha dejado que le cepillara el pelo, estando muy tranquila. ¡Cuando Bonga quiera volver por casa estaremos esperandola!