Chase revolucionó la casa con su pillería, pero todo lo que tiene de pillo, lo tiene de cariñoso. Es un perro muy joven y con energía, pero entra dentro de lo normal en su raza y edad y dándole buenos paseos luego en casa está tranquilo y se porta bien. Coincidió con otros perros y era muy juguetón y sociable con ellos, así que ningún problema para cuidar de él estando con más perros.