Chester es muy bueno, suele obedecer a la primera. En casa casi siempre está durmiendo y si está despierto está pegado a ti pidiendote mimos, tiene un tic en las patas traseras en cuanto le rascas y no deja de moverlas :) En la calle casi no tira de la correa, a no ser que se cruce con otro macho. Nos ha encantado tenerlo en casa.