En vez de atender a Daan, tuve la suerte de conocer a su hija Bona: una cachorra de un año súper cariñosa y juguetona 😊 Cierto que a la hora de los paseos hay que estar atento ya que no me está socializada con otros perros y reacciona con mucho estrés, pero es una perra lista y aprende con rapidez. Sin embargo, en casa es lo más tranquilo del mundo!! Un cachito de pan lleno de amor ❤