Kala es divina. Se porta bien, entiende todo, no roba comida, se lleva bien con niños y perros. Además es una dulce y sólo pide cariño. ¡Hace todo bien! En casa se llevó excelente con mi perra, iban juntas a todas partes. Entendió enseguida la rutina y se adaptó sin problema. Es una perra muy buena, y fue un placer tenerla en casa.