Kame es una rateja muy espabilada que no para. Felicito a su familia por la buena labor de socialización que han hecho con ella. No es fácil evitar sobreproteger a un perro tan pequeño pero ella se adapta a todas las circunstancias, se lleva bien con todos los perros y no le da miedo nada, Disfruta jugando sin parar o dando un buen paseo. Con Kame no hay tiempo para el aburrimiento. ¡Gracias por la confianza!