Estar al cuidado de KONGA ha sido una experiencia magnífica; una perra que no extrañó ni el sitio ni a mi en ningún momento; tiene un magnífico comportamiento con otros perros (machos y hembras), con gatos y con los niños es una auténtica delicia. Con mucha energía pero muy equilibrada de carácter, no plantea ningún problema en ningún momento. Todo un privilegio haber disfrutado con ella cinco días de juegos y paseos veraniegos. Gracias a su propietaria, Nora, por el regalo de habérmela confiado estos días. Ojalá volvamos a coincidir con la bellísima KONGA!