Adoptamos a Manolito (Manuel, oficialmente) en 2017. Venía ya muy bien educado, es tranquilo en casa, espera a salir a la calle para hacer sus cosas, no le gusta nada quedarse solo y es sociable con la mayoría de los perros que conoce (que son muchos, está acostumbrado a convivir con otros perros). En la calle se porta bien, es obediente, pero hay que estar alerta si hay conejos, pájaros o gatos. Adora el campo y le gusta jugar a correr con otros perros, pero se agobia si son muy activos, sobre todo si son más grandes que él. Podemos llevarlo a cualquier parte porque se porta muy bien y más que animal de compañía es animal de estar acompañado. Le encantan las caricias y la compañía humana.