Megan es un amor, ¡si nos hemos enamorado de ella cuidándola estos días! Los gatos le llaman la atención y puede salir de repente ladrando tras ellos pero aparte de eso, no les hace nada y el resto del tiempo no la escuchas en absoluto. Es una buenaza y le encantan los mimos y los achuchones. Con otros perros se lleva genial. ¡Estaremos encantadas de volver a tenerla en casa!