Qué maravilla haber tenido a Naia de vuelta. Nos visitó el pasado Enero y fue maravilloso. Esta vez no ha sido menos. Es una perrita con muchísima personalidad, noble, juguetona, cuica y cariñosísima. Es un placer tenerla en casa, pasearla, y en definitiva, cuidarla. De nuevo gracias a su maravillosa familia.
Cuidar de Naia ha sido algo realmente gratificante, nuevo y divertido. Es el primer Doberman del que cuido, y la experiencia no ha podido ser mejor. Es obvio que ello tiene mucho que ver con lo que la quiere su familia y lo bien educada que está esta preciosa y presumida perrita. No miento si digo que en cada uno de los paseos alguien siempre se paraba a saludarla. Por cierto, pasea de lujo, es una gozada. Y también es juguetona. Si juega con perritos más pequeños que ella, tiene muchísima delicadeza. Es glotona y sabe hacerse bien la despistada en cuestiones culinarias. No ladra, no rompe nada, se lleva bien con todos. En fin, espero poder verla pronto de nuevo. En casa siempre será bienvenida. Un abrazo grande a su maravillosa familia.