Runny es un perro con el que hay tener paciencia, tiene todas las virtudes de un labrador de 9 meses pero solo lleva explorando el mundo 4 meses, con lo que es bastante asustadizo, pero al final es capaz de disfrutar de los paseos. Con los otros perros es muy bueno y sumiso y le sirven de apoyo para explorar el mundo que le rodea.