Skippy es un perrito hermoso, muy juguetón y con energía. Al principio le asustaban algunos ruidos de la casa (sillas, puertas...) y sus dueños nos explicaron que probablemente no comería los primeros días, pero al sentirse tan cómodo y mimado en nuestro hogar, ¡Skippy comió toda su comida desde el primer día! Además, se relaciona muy bien con otros perros, él y Macchi se llevaron de maravilla. Skippy quiere mucho a su compañera Nala, juegan y se cuidan mutuamente. Por otro lado, la comunicación con sus dueños ha sido excelente desde el primer momento, muy organizados y agradecidos. ¡Estaremos encantados de volver a cuidar de Skippy! 🐾🥰