Sully esta vez no necesitó adaptación. Llegó contento de vacaciones a pasarlo bien. Se despertaba en la mañana listo para salir a trotar y gastar energía. Al salir de la casa ladraba al principio, pero entendimos que era su manera de recordarnos que no se nos olvidara la pelota. Así que si le muestras la pelota al salir, no ladra y sale tranquilo moviendo la cola. Ahora ya comparte la pelota con otros perros y juega en grupo. Eso sí, mejor llevar 2 para que haya para todos! Sully tiene todo nuestro cariño, es un dulce, y esperamos verlo pronto.
Sully es muy buen perrito. Se demora 1 día en adaptarse a la nueva rutina, en que está un poco nervioso, y ladra con los ruidos que lo asustan. Una vez que se relaja, es un amor. Le gusta hacer ejercicio y le fascina que le tiren la pelota, pero no le gusta compartirla con otros perros. Es como un niño chico. Se lleva muy bien con niños pequeños, tolera hasta pisotones en la cola, y devuelve un langüetazo. Se aprendió el camino al pipican y tiraba para llegar rapidito. Lo esperamos pronto nuevamente.