Se llama Dory, tiene 3 años y es una mezcla de bodeguero. Es muy miedosa y ladra mucho, pero cuando te conoce es la más cariñosa del mundo.
Ella vive en Granada con mis padres, pero aunque me tire mucho tiempo sin ir a mi casa es la primera que me saluda con muchos saltos y a continuación se convierte en mi sombra.
Es una perrita muy buena.