Fue un placer pasar un día tan especial para los novios cuidando de Kurko. Se portó genial, a pesar del lío que conlleva una boda, Kurko demostró ser un invitado modelo. Estuvo muy tranquilo durante la ceremonia y el cóctel. Es un perro muy cariñoso y juguetón. Nos encantó ser partícipes de ese gran día con él.