Kenny es un "adolescente" con muchísima energía y muchas ganas de jugar. Es tremendamente sociable con personas y perros. Eso sí, si otro perro le ladra o le gruñe, enseguida se aleja. No crea problemas. Necesita correr mucho, socializar con todos los perros que pasan por la calle, olfatear y pasear durante un largo rato. En casa le gusta estar a tu lado, yo dejo que se suban al sofá así que no tiene problemas para subirse y hacerse un hueco. Es muy atlético, por tanto también es muy fuerte. Es mejor no excitarle en casa ya que puede mover mesas golpeando sin querer con la cadera. En la calle es bastante obediente, aunque necesita saludar a todos los perros que encuentre. Es sociable con cualquier persona, pero hay que tener en cuenta que no controla su fuerza. Se puede jugar con él, nunca muerde, pero si la cosa se descontrola puedes llevarte un cabezazo. Eso sí, no es su culpa. Es joven y necesita gastar energía, así que quien debe poner de su parte para evitar golpes bruscos es el cuidador. Es muy agradecido, le encantan las caricias y es capaz de quedarse dormido si se le acaricia tranquilamente.