Maya se ha quedado en casa 9 noches y desde el primer momento se adaptó genial. Es una perra 10, no tiene problemas ni con perros ni con gatos y mucho menos con personas. Y qué decir de Rosa, no puede ser mejor persona, adora a los animales y es una mami perruna genial. Todo lo han hecho muy fácil y ya las estoy echando de menos.