Viajar es genial, ¿verdad? A nosotros nos encanta ir de viaje, explorar nuevos lugares y saborear cosas nuevas. Y mientras muchos de nosotros nos llevamos a nuestro perro de vacaciones, a veces la ubicación o la distancia hacen que el viaje no sea agradable para él. Desgraciadamente, a veces incluso es imposible. En ese caso, ¿qué podemos hacer cuando tenemos que dejar a nuestro perro un par de días?
Algunos deciden dejar a su perro en una residencia canina. Mientras esa es una de las opciones más populares, como propietario debes informarte bien sobre las condiciones de la residencia escogida. Primero, tienes que hacerte un par de preguntas:
¿Dónde se alojará mi perro?
La mayoría de las residencias caninas aloja a los perros en jaulas, que pueden ser muy estresantes para un perro que no esté acostumbrado a estar en lugares pequeños. Otra cosa que debemos tener en cuenta es que el lugar donde vaya a estar el perro esté limpio y libre de olores. Aunque debería ser así, uno tiene que asegurarse.
Entonces viene la siguiente pregunta muy importante:
¿Con qué frecuencia pasearán a mi perro?
Normalmente, en las residencias caninas sólo les dejan pasear una o dos veces al día durante algunos minutos. Si tu perro está acostumbrado, no hay problema. Pero acéptalo, la mayoría de nosotros le damos a nuestro perro más tiempo para estirar las patas, por lo que un cambio en su rutina podría influir negativamente en el bienestar de tu perro.
¿Qué comerá mi perro?
Esa es otra cuestión delicada. Un cambio en la dieta puede ser duro hasta para los perros más flexibles. Puede derivar incluso en diarrea y/o vómitos. La mayoría de los perros no comerán bien o voluntariamente durante su estancia en una residencia, por lo que es crucial insistir en lo importante que es una dieta sana. Todo ello puede ocasionarte costes extra.
¿Podrá mi perro relacionarse con otros perros?
Normalmente un perro suele llevar una vida solitaria en una residencia canina, careciendo del contacto con humanos y otros perros. Sin embargo, algunas permiten a los perros jugar juntos durante cortas sesiones de paseo. Aunque esto puede ser arriesgado, ya que el perro puede no llevarse bien con otros perros e incluso puede llegar a resultar herido durante el juego.
¿Suena alentador? Nosotros creemos que no. Así que, ¿qué alternativa a la residencia canina tienen los propietarios de perros?
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