Hoy traemos en Gublog una nueva receta de cocina para que tu perro se pueda relamer el hocico. En su día compartimos recetas variadas e incluso un menú navideño completo para los más peludos de la familia. Los que les gusta ponerse detrás de los fogones para sus perros están de enhorabuena, van a poder poner a prueba sus dotes de reposteros con esta receta de galletas para perros de plátano y cacahuete.
Además esta receta es sin gluten y sin cereales. Aunque tu perro sea intolerante a los cereales, podrás cocinárselas sin alterar su dieta. Tanto para la repostería perruna, como para la humana, existe una gran variedad de alternativas a las harinas tradicionales y el hecho de no poder comer ciertos alimentos no debe privarnos del placer de comer galletas.
Ingredientes de las galletas para perros de plátano y cacahuete
- 1 plátano bien maduro
- 2 huevos
- 120 gramos de manteca de cacahuete
- 140 gramos de harina de quinoa
- 70 gramos de harina de plátano
- Opcional: agua, harina de arroz (o de maíz, pero la receta dejaría de ser sin cereales) para trabajar la masa con las manos y espolvorear el rodillo y la superficie donde se va a amasar.
En este caso hemos sustituido la clásica harina de trigo por una mezcla de harina de quinoa y harina de plátano. La harina de plátano se obtiene con plátanos verdes que se dejan secar y se reducen en polvo. Su sabor puede recordar a la fruta de la que está compuesto, con un ligero toque a avellana. La harina de quinoa es otra harina apta para recetas sin cereales (grain free) porque la quinoa es una semilla y no un cereal. Su sabor tanto como su textura da mucha versatilidad a las recetas.
A la hora de preparar repostería para perros es importante acordarnos de lo que les sienta bien y lo que no. En otro post os recordamos los alimentos que pueden ser tóxicos para nuestros perros. Entre ellos encontramos el chocolate. Así que por muy sabroso que nos parezca, lo tendremos que apartar por completo de las recetas que vamos a realizar para nuestro perro. También es importante recordar que los ingredientes estrellas de las galletas humanas, esos que hacen que sepan tan bien, no son recomendables en exceso para nuestros amigos. Estamos hablando del azúcar y de la mantequilla. A un paladar humano, acostumbrado a que una galleta se derrita en la boca, estas galletas para perros (recordamos que la lista de ingredientes de esta receta puede resultar totalmente apetitosa para un ser humano) podrán parecer sosas o secas. Pero son nutricionalmente aptas para nuestros amigos y es lo que importa.
Material para las galletas para perros de plátano y cacahuete
- cortador de galletas con formas perrunas (nosotros usamos huesos, silueta de perro y casita pero es según el gusto de cada uno)
- rodillo de cocina
- papel de horno
Temperatura del horno: 180 grados
Tiempo de horneado: 15 a 20 minutos según los hornos (es mejor vigilar para que no se quemen las galletas)
Tiempo de preparación: 30 a 40 minutos
Preparación de las galletas para perros de plátano y cacahuete
Empezamos aplastando el plátano en una fuente hasta obtener una especie de puré. De ahí la importancia de que el plátano sea bastante maduro. Primero porque se aplastará más fácilmente y segundo porque sabrá más dulce. El azúcar naturalmente presente en la fruta nunca será tan dañino como los azucares añadidos. Además, al tratarse solamente de un plátano no nos arriesgamos a que sean grandes cantidades. El plátano que hemos usado no será el más bonito para Instagram, estamos de acuerdo. Pero queda mejor de sabor y textura para esta receta.
El siguiente paso es añadir los huevos y batirlos con el plátano. Aquí os vamos a dar un pequeño truco que os podrá servir para la repostería en general. El momento de incorporar los huevos, antes de añadir las harinas, es el momento perfecto para dar un empujoncito al “aire” que tendrá la masa. Batiendo bien, durante un rato un poco largo, permitirá incorporar aire y hacer que la preparación sea ligeramente espumosa. Así que ya sabéis, merece la pena detenerse un ratito y darle al batidor.
Ha llegado el momento de incorporar el segundo ingrediente estrella de esta receta, la manteca de cacahuete. Es muy probable que sea por este ingrediente que os habéis interesado por esta receta, porque el peanut butter nunca defrauda. Pero a la hora de preparar unas galletas para perros, tenemos que olvidarnos de la manteca de cacahuete americana, con su gran dosis de azúcar y grasas añadidos, y preferirle una manteca pura, hecha con un 100% de cacahuete triturado. La podréis encontrar en tiendas de productos naturales como los herbolarios, o en las grandes superficies en el pasillo de los productos orgánicos o los productos de otros países. La manteca que hemos utilizado por ejemplo es una crema de maní (se usa mucho en algunos países de América Latina) que hemos encontrado en Al Campo.
Ahora vamos a incorporar las harinas. Recomendamos empezar por la harina de plátano porque usaremos menos cantidad. Tanto para la harina de plátano como para la harina de quinoa, habrá que tener cuidado de incorporarlas poco a poco, batiendo bien para que no se formen grumos.
Obtenemos una masa que según el cuidado que habremos tenido al incorporar las harinas, y lo que habremos batido los huevos, tendrá más o menos cuerpo. Pero si no es vuestro caso, no os preocupéis. En repostería algunas veces cuando uno se sabe los trucos correctos, se pueden corregir o mejorar las cosas. Aquí es cuando entran en juego los ingredientes que marcamos como opcionales al principio de esta receta. Nuestro objetivo es llegar a tener una masa lo suficiente elástica para poder trabajarla con las manos, pero que tenga bastante cuerpo para que no se nos quede demasiado pegada entre los dedos, en el rodillo o sobre la superficie en la que la estamos trabajando. Si la masa está muy seca, simplemente iremos añadiendo agua (en muy poca cantidad, volvemos a batir para ver el resultado y si es necesario volvemos a echar agua). Si la masa está demasiado húmeda, podemos añadir harina de arroz o de maíz (recordamos que si es de maíz la receta deja de ser sin cereales). Están especialmente indicadas por ser harinas finas con buen poder de absorción. La harina de maíz será más fácil de encontrar ya que casi todos los supermercados venden la famosa Maizena que no es otra cosa que harina de maíz.
Una vez obtenida la textura deseada, espolvoreamos un poco de harina sobre el rodillo, la superficie de trabajo y nuestras manos para que la masa no se pegue. Volveremos a espolvorear las veces que haga falta.
Vamos formando bolas pequeñas de masa que vamos aplastando con el rodillo y una vez que tenga un espesor adecuado cortamos formas. Si la masa queda demasiado espesa, las galletas serán demasiado gordas y llenarán mucho, si es demasiado fina, al cocer se quemará o se romperá. Con los moldes cortamos formas hasta terminar la masa y las disponemos en una bandeja recubierta con papel de horno para hornearlas.
Después de que el horno haya hecho su magia durante unos 15 o 20 minutos a una temperatura de 180 grados obtenemos unas galletas para perros doradas y crujientes. Se podrán conservar de 5 a 7 días si las guardas en un recipiente hermético. ¡Pero es más probable que tu peludo termine de comérselas antes!
Una receta que podrán saborear tanto perros como humanos. Aunque, no nos vamos a engañar, las hemos catado y a nuestros paladares acostumbrados a una saturación de azúcar y grasa les ha sabido un poco sosas. Si vas a preparar estas galletas para perros no te olvides de hacer una foto al resultado final. Nos encantaría poder verla en Facebook, Twitter o Instagram! Y si sale tu peludo deleitándose con ellas ¡mucho mejor!
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