Bienvenidos a casa de los abuelos perrunos

Desde los años 60 convivo con perros. Cada uno, desde Alfonso hasta mi querido Zipi, ha sido parte de mi vida y mi corazón. Soy una señora ama de casa que cuida a los perretes como si fueran sus propios nietos. En nuestro hogar, los mimamos con cariño, paciencia y mucha atención, porque creemos que un poquito de malcriarlos también es parte de hacerles sentir como en casa. Si hay conexión especial con el perruno, ¡hasta un poema puede tener! Aquí no hay jaulas ni soledad: hay sofá, compañía constante, paseos tranquilos y, sobre todo, un ambiente familiar y lleno de amor. Si buscas un lugar donde dejen a tu peludo y tú te quedes tranquilo/a sabiendo que está en buenas manos… ¡esta es su casa de “abuelos”!