Como si fuera mío

He vivido con perros y gatos toda mi vida aunque ahora, después de la partida de mi querida Corchea, ninguno ha llegado a mi vida para quedarse. Amo a los animales. Por ellos, llevo siendo vegetariana desde mi juventud. Por ese amor, he adoptado a los 7 que la vida me ha traido. Por ellos, estoy apoyando la labor de la Fundación El refugio como hogar de acogida. También empatizo con tu preocupación por su bienestar. Durante años, tuve la suerte de poder contar con los buenos cuidados de mi vecina María. Pero, antes de ella, lo pasaba mal al comprobar, a la vuelta de un viaje, que mis queridos amigos (en ese momento 4 gatos), no habian sido tan bien atendidos. Recuerdo perfectamente mi sentimiento de culpa/rabia/impotencia ante su aire triste y su pelo apagado. Si me remonto a la infancia, recuerdo mi angustia cuando dejabamos a mi Troubadour en un "hotel para perros" y éste, metido en una jaula, aullaba de miedo y tristeza mientras nos ibamos. Si me comprometo con vosotros, cuidaré de tu amigo con la misma responsabilidad y el mismo amor que yo deseaba para los míos. Le ofrezco un piso confortable y armonioso con una terraza llena de plantas de la que podrá disfrutar conmigo. Trabajo en casa y decido mis horarios por lo que tendrá compañía y salidas por mi barrio que ofrece múltiples opciones de paseo con zonas verdes. NOTA: El animal debe disponer de un Seguro de Responsabilidad Civil en vigor y una cartilla veterinaria que le acredite estar al día en materia de vacunación de los que se me facilitara copia escrita o digital.