Sobre Marta
Desde los 15 años he tenido un perro al que cuidé y amé con toda mi alma hasta que falleció en octubre. Echándole de menos y con ganas de seguir sintiendo ese amor, veo la oportunidad de disfrutar de mi verdadera pasión, aprovechando la disponibilidad que suelo tener y las ganas de compartir mi tiempo con un compañero peludo. Te aseguro que tu mascota se enamorará de mí tanto como yo de ella.
Ahora mismo vivo en un piso pequeño, por lo que si deseas que el perro se quede en mi casa sería ideal que estuviese acostumbrado a estos entornos.
A la hora de los paseos los llevo siempre con correa, recojo las cacas y no dejo que se acerque a otros perros, a no ser que me digan que sí puede. Me gusta mucho mimarlos y no tengo problemas con que se suban al sofá, pero si no lo tienen permitido en su casa entonces no tengo problemas en poner restricciones.
Puedo cuidar y pasear perros grandes siempre y cuando estén bien educados, ya que no puedo arriesgarme a que en un paseo un perro que pese más que yo me dé un tirón de la correa (la seguridad es lo primero).
Por lo demás, me adapto sin problemas a cualquier necesidad que tenga tu mascota (medicación, alimentación, rutina, etc.)
A lo largo de todos los años que tuve a mi perro pude ofrecerle todos los cuidados que necesitó. Cubrí sus necesidades, lo mimé y lo cuidé como si mi vida fuese en ello. Al ser una raza delicada tuve que administrarle medicación y tratamientos en muchas ocasiones, y más aún en su último año de vida que por desgracia perdió la movilidad. Como madre perruna puedo decir que sin duda sabré cuidar de tu mascota.